LOS AMIGOS DE CASTRO

Suponemos que fue un favor a un amigo lo que hizo el alcalde Castro durante el último desayuno de prensa, al presentar como "una bomba" el boceto de proyecto de las nuevas instalaciones deportivas para la empresa Getafe club de fútbol. Una empresa que, de momento, sólo está en la imaginación del primer edil getafense y en los sueños ladrilleros del presidente futbolero Torres. Una idea tan descabellada como poco social-socialista, pensada, únicamente, para enriquecer más aún al responsable del equipo de fútbol.

Todavía no salimos del asombro. El desayuno de prensa transcurría plácidamente, sin preguntas complicadas para los concejales presentes, y cuando ya se iba a dar por finalizado, se da entrada al presidente del equipo de fútbol Getafe, D. Ángel Torres, cargado con unos dibujos, quien toma asiento al lado del alcalde, al tiempo que éste trona que dejaba “la bomba” para el final.

La bomba no es otra que un proyecto a mano alzada de una ciudad deportiva nueva para la empresa futbolera controlada por el ladrillero Torres, edulcorada con el “sueño” de la petición de Getafe como subsede olímpica en la próxima vez que Madrid se presente para se elegida por el COI.

Las caras, como siempre las caras son el reflejo del alma, y nos preocupamos de escudriñar entre las faces de los concejales presentes, principalmente de los ediles socialistas, los lugartenientes de D. Pedro, D. Francisco David y D. Francisco, responsables de la portavocía gubernamental y de la portavocía partidista respectivamente, quienes miraron para otro lado, suponemos que rezando porque el trago pasara lo antes posible.

Analicemos la situación cual, como todo cuanto acontece alrededor de D. Pedro, no es baladí, y la noticia no se dio en la sede de un partido ni en un bar, sino en pleno despacho de alcaldía y dentro de un acto institucional.

D. Pedro presentó el proyecto a los Medios como el sueño de que Getafe se convirtiera en subsede olímpica, en apoyo de la capital del Estado. Pero, además, expreso su convencimiento de que la idea era maravillosa, porque dotaría a la empresa de D. Ángel de unas nuevas instalaciones deportivas, mucho más grandes que las actuales, y por lo tanto, se liberaría para la ciudad las que ahora utiliza el Club futbolero Getafe; que son públicas.

Claro, la cosa estriba en que estas nuevas instalaciones por construir las pagarían los ciudadanos, el Ayuntamiento y, quizá, la Comunidad; para esto D. Ángel nos comentó que estaba haciendo gestiones. O sea, que la ciudad recuperaría unas instalaciones públicas, pagadas de los impuestos y de uso exclusivamente empresarial-privado (y eso que esta empresa futbolera se harta a ganar dinero de las televisiones, de los partidos, de la publicidad, etc.) y a cambio le pagaría a esta empresa otras instalaciones mucho más nuevas, bonitas, caras y grandes. Excelente negocio para el ciudadano; el auténtico pagano.

El proyecto, se nos explicó, estaba en fase de sueño, aún. Por supuesto. De hecho, Madrid aún no se ha presentado a una nueva candidatura olímpica. Segundo, los terrenos donde se pretende desarrollar este proyecto ¡no son de Getafe!. Sí, han leído bien, no pertenecen al municipio getafense, sino al vecino Madrid. Veamos. El alcalde D. Pedro quiere construirle una ciudad deportiva nueva a D. Ángel, con el dinero de todos los ciudadanos, pero en terrenos que no son de su incumbencia. Sigan asombrándose.

¿Saben a quien pertenece gran parte de los metros cuadrados donde se pretende construir esta nueva maravilla del deporte? Han acertado, a D. Ángel, el mismo que se quiere beneficiar de la construcción (dinero) pública para uso privado. Y luego la alcaldía se queja de la gestión hospitalaria privada-concertada de Valdemoro (por eso de Perales)

Continúa el pasmo. La idea de D. Pedro y D. Ángel es permutar un terreno al Ayuntamiento de Madrid para poder hacer esta obra faraónica (de nuevo el espíritu de Gallardón) Pero parece ser que, según fuentes de toda solvencia, el concejal delegado de la cosa madrileña no está por la labor, es más, ha dicho que no.

Claro, las caras de D. Francisco David y D. Francisco eran todo un poema épico. No es para menos. Hace un mes, D. Francisco, como concejal de urbanismo, declaró taxativamente que no se iba a construir otro campo de fútbol al Getafe. Que no. Pero unos días después, sale su compañero de partido y jefe, D. Pedro, diciendo que sí. Haber quien da más. Por su parte, D. Francisco David, contador de los euros municipales, estaría haciendo sus cálculos mentales para determinar a cuanto tocaríamos cada getafense para pagar el nuevo capricho de D. Ángel y D. Pedro.

Verán ustedes. D. Pedro citó que el equipo de fútbol necesitaba un nuevo campo, que Getafe tenía que ser subsede olímpica, y que el proyecto cumplía con ambas pasiones. Por su parte, el futbolero nos dijo que, en efecto, su equipo necesitaba otras instalaciones, porque las de ahora, no eran suficientes. Recordemos que hace un año se terminaron las obras de ampliación y mejora, que han costado a los getafenses y madrileños muchos millones de euros del erario público; y todo para una empresa millonaria, y un señor, más rico aún.

Lo cierto es que, con la que está cayendo sobre el urbanismo madrileño en general y el getafense en particular (hoy mismo el PP regional ha presentado denuncias en el juzgado donde se citan a exconcejales socialistas getafenses) no parece el mejor momento para presentar macroproyectos urbanísticos que tienen, como fin principal, el que D. Ángel especule con los miles de metros que ha comprado en la zona a canjear con el Ayuntamiento de Madrid, y que en estos metros de su propiedad, la Administración pública construya instalaciones privadas; porque la idea sería que D. Ángel vendería a buen precio al Consistorio getafense los terrenos para que el Ayuntamiento construyera con dinero público unas instalaciones de las que se beneficiaría el vendedor. Todo para casa pensará el presidente futbolero.

Cuando el urbanismo de Getafe está en entredicho, no sólo en las vocerías del Partido Popular, sino también en el propio diario de PRISA, El País, paginas que, según el mentidero getafense, hicieron estallar de ira a D. Pedro, cuando la gestión de antaño del suelo y el ladrillo de Getafe está en el punto de mira de la polémica política y judicial, cuando se está cuestionando políticamente, de momento, ya veremos si judicialmente, las andanzas de varios ex concejales socialistas, los “no éticos”, pero que continúan entrando al Ayuntamiento como pedro por su casa y algunos se presentan como conseguidores e intermediarios de suelo... Con todo esto, a D. Pedro no se le ocurre otra cosa que presentarnos su bomba.

Como otras veces, la noticia no ha tenido demasiada trascendencia y menor análisis, pero la verdad es que tiene gran enjundia y merece la pena observarse con lupa.

Lo sentimos por D. Francisco David y D. Francisco, concejales que intentan mantener la nave a flote, pese a todo y pese a todos, pero que con estas salidas de D. Pedro, tienen dificilísimo el gobierno del timón del Ayuntamiento, del Grupo y del Partido.

Y las elecciones a la vuelta de la esquina.