30 julio 2006

EL PLENO DE GETAFE VIERNES 28 DE JULIO

los vecinos se marchan cabreados Viernes mañana, todo a punto para las vacaciones, posiblemente el último pleno del curso.

Según Alcaldía, el Pleno iba a ser corto y con contenidos administrativos, vamos, sin importancia. Pero la realidad era otra, y la reunión del Consistorio estaba plagada de asuntos políticos de enorme calado.

No voy a hacer una crónica del Pleno, sino que me voy a quedar con las píldoras que, para mí, son las más importantes.

Vean la foto. Los anónimos testigos que salen en ella son vecinos enormemente enfadados con el Gobierno municipal, y se marcharon cabreadísimos, después de llamar mentirosos, falsos, hipócritas y otras lindezas, cuales escuché perfectamente porque estaba delante de ellos, a 50 centímetros, a los concejales del PSOE e Izquierda Unida.

Eran vecinos del Sector III que están hartos de los ruidos y molestias que, una serie de gamberros, les procuran alrededor de la pista de patinaje levantada por el Ayuntamiento, a razón de los Presupuestos Participativos. Los vecinos, votantes de pro, fueron al Pleno a escuchar soluciones a su drama: convivir con vándalos que destrozan todo, que hacen ruido de madrugada, que no respetan la ley ni el orden; y sólo escucharon una batalla política entre el PSOE-IU y el PP.

Pero lo que más les enfadó, lo que les alteró, lo que les hizo abandonar SU SALA, porque la sala de Plenos, como el resto del Ayuntamiento, es del Pueblo, y no de los concejales asalariados de este mismo Pueblo, fue que el Gobierno Local les faltara al respeto, les insultará, diciendo que eran tontos, que estaban siendo engañados y dirigidos por el Partido Popular. Eso les hizo entrar en cólera.

Yo no sé si el PP convidó a estos vecinos-votantes, pero lo cierto es que ellos, hicieron uso de su derecho fundamental de asistir al Pleno. Es verdad, también, que según la norma (redactada por los políticos para su propio y único beneficio) para que un ciudadano/grupo hable en el Pleno, tiene que solicitarlo reglamentariamente, y estos vecinos no lo hicieron. También tenía razón el alcalde Castro, al pedir silencio, porque al interrumpir la intervención de los concejales socialistas e izquierdistas, insultándoles y faltándoles al respeto, tampoco es de recibo, no son formas adecuadas de convivencia.

En todo caso, los vecinos, de forma maleducada, mostraron su enfado y su malestar de meses, no caprichoso, por lo que están sufriendo, y así lo hicieron saber a quien correspondía: al Pleno Municipal y al Gobierno Municipal.

El resultado fue un caos. Lo de menos es cómo finalizó la propuesta, aunque tiene su enjundia, porque la batalla entre Casarrubios, Santos y Sánchez fue sangrienta, y si destacaré que el concejal socialista se creció cuando los vecinos abandonaron la sala; por cierto, con mucha habilidad, el veterano socialista contestaba directamente a los vecinos, en lugar de a su rival Popular; casta política, a cada cual lo suyo.

El caos sobrevino cuando los ciudadanos salieron enfadados, gritando e insultando a su gobierno. Es síntoma de divorcio entre los políticos-gobernantes y el Pueblo. Lo de menos era la acusación de los socialistas en cuanto a que el Partido Popular había llevado a su cla para protestar. Ésta es una práctica habitual de los socialistas, que llenan el salón de Plenos cuando se van a debatir propuestas complicadas políticamente, y en los sillones se apoltronan cargos de confianza, responsables de asociaciones con prebendas y demás amigos del partido (con nóminas agradecidas) Lo que pasó es que Castro, que venía de vacaciones, no calculó la jugada, demasiado tenía con la brecha abierta en su propio gobierno, y no se convocó a la cla oficial, por lo que el salón, desangelado, sólo tenía el glamour de los vecinos molestos con el gobierno. De hecho, cuando se marcharon estos ciudadanos, el salón se quedó con los Medios de comunicación, escasísimos, los miembros de alcaldía y comunicación municipal, y un par de almas más.

La pena, lo triste es que, aunque el Pleno se transmite por Internet, las cámaras no muestran la sala, aunque sí habrán recogido los insultos, y el malestar de los ciudadanos. Aunque, tanto este comunicador, como la cadena de TV Localía, a mi lado, sí que recogieron la algarada vecinal. Lo que no sé es si la habrán editado, porque desde mi hogar no recibo la señal de Localia-Madrid; y es que soy uno de tantos getafenses que han tenido que emigrar a otra ciudad cercana, debido a la mafia ladrillera getafense de los "poco éticos".

Otra píldora que me llamó la atención fue la actuación de Izquierda Unida. Cada día más parece una película de polis americana: poli bueno, poli malo. Mientras que Sánchez Coy estuvo excelente, claro, conciso, seguro en sus respuestas y siempre cordial y dialogante, incluso cuando José Luis Moreno le recriminó que llamará "Estado Terrorista" a Israel, a lo que Coy respondió, reafirmándose en lo dicho, porque es su parecer. Silvia Uyarra no estuvo a la altura, e insultó gravemente a José Luis Casarrubios, llamándole "misógino" y otras lindezas. No venía a cuento, no venía a razón. Y bien que este concejal Popular se caracteriza por su sarcasmo e ironía, pero no realizó ningún comentario que mereciera el término despectivo de odiar a las mujeres. No es la primera vez, y en el gesto de Casarrubios se recoge la dureza del golpe que recibe cuando es acusado de esta ignominia. ´

Es cierto que, en ocasiones, demasiadas, los concejales de uno y otro bando se alteran y incluso se insultan en el fragor de la batalla dialéctica; y en otras muchas oportunidades, les he visto después charlar tranquilamente y darse cordialmente la mano e incluso un beso. Pero lo de Uyarra es salirse del tiesto. Izquierda Unida va fenomenal, defendiendo su ideario y propuestas está calando profundamente en el Pueblo de Getafe, por lo que no precisa de ataques furibundos y fuera de lugar. No tiene sentido, es gratuito y perjudicial para la Coalición.

Últimamente, cada vez que interviene José Luis Casarrubios, es atizado con teas ardientes por parte de mujeres del otro banco. Creo que es una persona educada, y no merece este trato, entre otras cosas, porque no es el Portavoz y poco daño hacen así al Partido, y mucho a la persona. Pero, ante todo, porque este concejal es el representante de muchos cientos de ciudadanos que merecen todo el respeto. Esta es la esencia de la democracia, incluso de la dictadura Partidocrática que sufrimos; y hay que aceptarla.

La última píldora que destaco hoy, ya veremos mañana, porque el Pleno dio para mucho, muchísimo (¡qué pena de desayuno de prensa perdido, la de cosas que podríamos haber preguntado a los tenientes de alcalde, si nos hubieran dejado) es la batalla dialéctica, pero educada por la proposición del PSOE-IU en cuanto a pedir el cese de la Guerra no declarada en Oriente Medio.

No voy a valorar ahora la propuesta de los unos ni la respuesta de los otros. Pero si quiero dejar constancia de que me parece estupendo que, una ciudad humilde y pequeña como Getafe, se haga eco de esta barbarie, y pugne por la solución. Los tres grupos coincidieron en lo mismo: hay que frenar la guerra. Discreparon en cuanto a cómo y cuánto se incluía a Israel y a los grupos terroristas islámicos (Hamas y Hezbola) Pero fue un debate bonito, tenso, caliente y lleno de sentimientos, donde los tres luchadores de la palabra se lucieron. Me gustó Coy, firme como una roca con sus ideas. Me gusto Moreno, claro y preciso, poniendo el dedo en algunas llagas que dejaron abiertas los proponedores. Y me gusto Lucas, sereno y conciso a la par que oficialista.

Para terminar, como epílogo, destacaré la escena que observé, prácticamente en exclusiva, de un alcalde Castro platicando con el portavoz izquierdista Coy al finalizar la escena. El ambiente estuvo tenso durante todo el Pleno, debido a las muchas noticias publicadas en cuanto al peligro real de ruptura del gobierno local. Castro, hábil como siempre, esperó al final, a observar y conocer como surgían los acontecimientos, y finalizó acercándose a su socio de gobierno para, suponemos, aclarar el asunto. El gesto tenso y firme de ambos lo dijo todo. Aunque puedo asegurar, que las aguas se están remansado y todo puede volver a la tranquilidad. Siempre y cuando, el fontanero que ha propiciado la ruptura, no vuelva a las andanzas

28 julio 2006

GALLARDON: POR ENCIMA DEL BIEN Y DEL MAL

El alcalde de Madrid, Alberto Ruiz Gallardón tiene un sólo problema: creerse que está por encima de todo y de todos. Desde luego, la humildad no es su fuerte.

Gallardón no fue mal presidente autonómico, aunque llegó a creer que Madrid, la región, era un país, y él su responsable. Actuaba como si de su propio reino se tratara y no le importaba negociar con cualquiera, a costa de sus propios compañeros y partido, con tal de seguir "siendo el rey" como dice la canción.

Ahora es alcalde de Madrid, la ciudad, y de nuevo se cree el jefe de gobierno de un país. Es más, ahora considera que lo único importante y válido es la metrópoli, siendo la Comunidad, algo colateral. Su teniente de alcalde no es tal, sino Vicealcalde, como es Vicepresidente el sustituto del Presidente (de un gobierno) Él se ha inventado una pseudo-policía local, sólo para el tránsito rodado, para la cual hubo que cambiarse la Ley, el Congreso, nada menos. Y lo hizo, porque para el PSOE; todo lo que huele a Gallardón es fragancia sublime, porque estará en contra del rival.

Madrid es una ciudad difícil, pero el "faraón" ha conseguido convertirla en un infierno. No es el Madrid de siempre, el mío, donde nací yo y mis padres, y mis abuelos, sino un engendro salido del turbio cerebro de este político sin ética ni moral, que sólo busca su engrandecimiento personal, a costa de todos. Que se lo digan a su jefa, Esperanza Aguirre.

Pero lo peor ha sido su jugada con la fe que dice profesar: la católica. Cuando Juan Pablo II visitó España, Gallardón se arrodilló ante el Sumo Pontífice y le beso el anillo; tal y como hacen los auténticos creyentes católicos que reconocen en el Papa de Roma al Vicario de Cristo.

Gallardón será católico, pero va a casar a dos homosexuales. Y esto no es compatible. No estoy juzgando ni valorando el matrimonio gay, no soy quien, pero la doctrina católica, el Magisterio de la Iglesia a la que pertenece el alcalde madrileño, prohibe este tipo de matrimonios. Sin embargo, Gallardón lo va a hacer.

El propio Arzobispo de Madrid, su obispo, se lo ha recordado. De nada servirá. La lucha por el voto gay es más importante para este político ambicioso que cualquier dogma moral.

Habría que recordarle a este sujeto, el mismo que hace lo que le viene en gana con la ciudad, y encima se jacta de que todos los madrileños le apoyan y alaban sus gustos, que se llega a alcalde con el voto de los ciudadanos, sólo así, y que es una responsabilidad de gestión administrativa. Nada más.

La fe es otra cosa, las creencias morales y religiosas están muy por encima de la lucha partidista y de las batallas electorales. Con este acto: casar a dos hombres, Gallardón creerá ser un poco más héroe, un poco más presidente de su "país" imaginario; un poco más Hombre de Estado. Pero, en realidad, habrá traicionado a su Fe, a su Iglesia y a los miles de cristianos que le votaron.

Para ellos va este mensaje. Lo ha dicho el Papa, lo repiten los obispos de todo el mundo: no se puede votar a un político que atenta contra la doctrina y el magisterio católico; no es honrado ni ético cristianamente hablando.

Y no sólo católicamente, sino que todas las grandes religiones/iglesias opinan igual. Por lo tanto, cuando en mayo de 2007 acudamos a las urnas, debemos valorar, además de las promesas-mentiras electorales, los actos de aquellos que quieren representarnos.

Madrid tiene a una mayoría de católicos, que deberán votar en conciencia.

No se trata de excomulgar a nadie, allá cada cual con su conciencia, sino de negarles el voto a todos aquellos que se dicen católicos o cristianos y no cumplen con su Fe.

Así de sencillo. La excomunión para un político como Gallardón sólo le traería rédito electoral. Negándole el voto podemos negarle su continuidad en el sillón consistorial. Así de sencillo.

Aún puede rectificar. Que haga lo que quiera. Los votantes se lo demandarán dentro de pocos meses.

26 julio 2006

EL GOBIERNO DE GETAFE ESTÁ ROTO... ¿QUIÉN LO HA ROTO?


Nos van a llamar exagerados, pero la realidad nos viene a dar la razón a cada día que pasa: en Getafe hay una crisis de gobierno real entre el PSOE e IU.

Hemos escuchado en muchas ocasiones a conocidos afiliados socialistas referirse a las diferencias entre los concejales del PSOE y los de Izquierda Unida, como mero juego, como una actuación de cara a la galería; porque a ambos les interesa estar en el Gobierno, por lo mucho que les proporciona el Poder.

Pero Gregorio Gordo lleva semanas alentando otra idea muy distinta. En la entrevista que le realicé, y que fue publicada por el Periódico GETAFE AHORA, en su número 2, Gordo aseguraba que, pese a lo que vocea Rafael Simancas a todos los que le quieren escuchar, en estos momentos, están más lejos que cerca de gobernar en la Comunidad PSOE e IU en coalición. Lo mismo sucede en Getafe. Gregorio "Goyo" ha afirmado tajántemente que IU no está realquilado en el gobierno municipal, sino que éste está formado por el PSOE e IU, por IU y el PSOE, atendiendo al número relativo de concejales, pero formando parte al unísono del mismo. Es más, aseguró que si el PSOE no está a gusto en este gobierno, se puede marchar, y ellos gobernarían en minoría.

No es chulería, sino todo un compromiso de posicionamiento político: la IU de Gregorio Gordo no quiere ser la tonta útil del PSOE de Castro. Ni más ni menos.

Y las diferencias se han hecho notar, peligrosamente, en los últimos meses. El motivo no es otro que la forma de gobernar de Pedro Castro, que continúa pensando (y vendiendo) que en Getafe sólo gobierna él, y que la Coalición de Sánchez Coy, está de invitada, de prestada, de paso.

Pero lo que más ha alejado a ambos grupos ha sido su formulación política. Mientras que IU mantiene la defensa cerrada de lo Público, el PSOE de Castro se ha vendido a la privatización y al Liberalismo del Centro. La cerrazón del concejal José Manuel Vázquez, mandado por Pedro Castro, ha roto la unidad sindical (que jamás existió, porque la CGT mantiene posturas de izquierdas siempre) en la función pública. UGT ha apoyado sin reservas a los socialistas; lógico, teniendo en cuenta el regalo de 29 millones de euros que ZP ha realizado al sindicato hermano; mientras que CCOO e IU se han alejado y protestado de las tesis liberales-centristas del PSOE getafense; medidas que firmaría sin problemas el PP de José Luis Moreno.

Pero lo que realmente ha terminado por matar la camaradería entre ambos partidos ha sido la posición de alcaldía respecto al Desarrollo de los Molinos-Buenavista.

Izquierda Unida pretende que la totalidad de viviendas que le corresponde levantar al Ayuntamiento, por el suelo que legalmente se queda, las haga la EMSV, empresa pública municipal, de forma que éstas sean realmente económicas, alrededor de los 20 millones de pesetas, como máximo.

Pero IU no se fía del alcalde, ni del PSOE, ni de Santos Vázquez. Y no lo hacen por los compromisos políticos que tienen con varios grupos de poder social de la ciudad, como son, las Casas Regionales, entre otros, a los que desde el Ayuntamiento se les ha asegurado que podrán construir una gran cantidad, que se aproximan a las que pretende levantar Coy a través de la EMSV. Además de las Casas Regionales, otros cercanos al poder socialista como son algunos presidentes de Asociaciones de Vecinos, quieren su parte de las tajadas. Así mismo, Alcaldía podría reservar algunos cientos de viviendas a ciertas cooperativas que se podrían quedar sin suelo, y cuya marca dice mucho en Getafe.

Para Coy es esencial que la Empresa pública de la vivienda construya en Los Molinos-Buenavista, porque rompe en mercado prohibitivo que sufrimos, permite acceder a precios lógicos a los demandantes, y pone un punto de normalidad a la existencia de una empresa como esta, que no hace prácticamente nada; porque no la dejan. Y no lo hacen, porque los intereses de los exsocialistas, ahora ladrilleros, pesan mucho sobre el PSOE local.

Por eso, el Urbanismo ha sido la gota que ha colmado el vaso de las desavenencias entre socialistas e izquierdistas, y Gregorio Gordo, desde su atalaya regional ha lanzado el grito de guerra. Y decimos atalaya, porque Rafael Simancas “el Pacificador” líder del socialismo madrileño, sabe que la IU de Gordo es imprescindible para sus aspiraciones a tomar el sillón de Esperanza Aguirre. Por eso, desde IU-Madrid han lanzado un mensaje claro: no gobernará la derecha si podemos evitarlo, pero para ello hay que negociar y dialogar, y acercar posiciones; es decir, el PSOE tiene que dejar de hacer política de centro-derecha, liberal y de apoyo al empresariado y a la privatización, y volver al fuero de la Izquierda real.

Gregorio Gordo no está dispuesto a que en Madrid se repita lo que está sucediendo en España, donde un Gaspar Llamazares “el primo pequeño” actúa de tonto útil para Rodríguez Zapatero, permitiendo el desgaste de la Coalición, y el peligro de su desaparición en las turbulentas aguas socialistas.

Y lo mismo que en Madrid, en Getafe. Tanto Gordo como Coy, aspiran a que en la Capital de la Comarca se reproduzca la situación de Leganés, donde el alcalde Pérez (PSOE) está sujeto y atado por la cuerda izquierdista de Raul Calle, cada día más popular, más querido, habiendo demostrado que se puede realizar una política municipal de izquierdas si se permite; y él lo puede hacer porque el PSOE está en minoría, y depende de IU para sobrevivir.

Pero mientras el alcalde de Leganés ha comprendido que gobierna gracias a IU, en Getafe, Pedro Castro no lo admite, y piensa que aún mantiene el poder absoluto. Y no es cierto.

Por su parte, José Luis Moreno no tiene razón (lo ha dicho en su Blog) cuando afirma que si Izquierda Unida no está contenta en el gobierno local, debe marcharse. ¿Por qué? El gobierno no es del PSOE, sino de coalición entre ambos, y el principal objetivo es, además, evitar que el Popular acceda al despacho de la segunda planta.

Si IU se marchara ahora del gobierno, podría parecer que lo hace, solamente, por motivos electorales, y que sólo estaban gobernando por el Poder y las prebendas. Claro está, la situación se puede transformar en insostenible. Castro y su equipo saben sobradamente que su continuidad a partir de Mayo-2007 está muy discutida; vamos, muy difícil. Por eso tienen que luchar por cada voto, y para ello tienen que eclipsar a Izquierda Unida.

Aquí puede estar la madre del cordero. Castro, estratega como nadie, sabe que necesita cada voto de la izquierda, ahora que José Luis Moreno le ha alcanzado, sino sobrepasado, y para conseguirlo, tiene que aparecer en solitario; y para ello, lo mejor es romper el gobierno y dejar a IU en la calle, sin concejalías, sin empresas públicas, sin acceso al Consejo de Gobierno, sin acceso al Poder de la comunicación institucional, la maquinaria más poderosa y dañina (partidistamente hablando) O sea, dejándola en la Oposición, como está el Partido Popular, siempre ninguneado.

Muchos pensarán que esta posibilidad es imposible, porque Pedro Castro quedaría en minoría y no podría gobernar. Pero la cosa no es así. Queda menos de un año para las elecciones, y Castro y compañía se han preocupado de sacar adelante sus proyectos más emblemáticos y señeros, los más electoralistas (Centro de Poesía, Biblioteca César Navarro, Carpetania, Metro, etc.) O sea, todo lo que figura en el DVD famoso, lo pague quien lo pague (que no es Castro, sino Esperanza Aguirre) De forma que estos meses los podría pasar en minoría, sabedor de que IU no votará jamás a favor del PP, y sí a favor de las pocas medidas de izquierdas que el PSOE promueva.

Castro sólo tendría que subsistir con una economía de batalla, y aguantar el tirón de unos meses; mientras la CAM continúa con el chorreo de millones, los vecinos del Bercial comienzan a llegar y las máquinas entran en los Molinos en diciembre. Al loro con esto, porque el escándalo de los Molinos se resolverá en diciembre, a 5 meses de las elecciones, de forma que, pase lo que pase, no habrá margen de maniobra para muchas protestas, y Castro se podrá vender (cosa que hace extraordinariamente) como el summo hacedor y dominis.

Pero Pedro Castro tiene otro as en la manga. En el caso de que las cosas vinieran demasiado mal y los meses que restan para las urnas se transformaran en un infierno, haría las paces con la concejala Mikue, No Adscrita, y la atraería al PSOE, en forma de voto en los Plenos, con lo que alcanzaría la mayoría absoluta, sin el peligro de denuncia por transfugismo; y entonces, podría continuar gobernando como a él le gusta. No crean que esto es política-ficción. Se ha visto a Mikue en varios actos socialistas, y aunque Castro se portó mal con ella, dejándola sin poder consistorial, todo es negociable en el mundo de la política.

¿Está Pedro Castro propiciando la crisis de gobierno, con sus políticas poco izquierdistas? Es una posibilidad que todos en Getafe deben tener en cuenta; porque no es baladí; y los muchos logros de José Luis Moreno, y el mucho trabajo de Sánchez Coy, se pueden quedar en agua de borrajas ante la estrategia, siempre eficaz, del viejo político socialista.

Y de paso, de la lista del PSOE ni se habla. Y de los posibles candidatos menos. Y de su ascenso a la CAM, para que contar.

CRISIS DE GOBIERNO SIN PRECEDENTES

PUBLICADO EN SUR PRESS DIGITAL EL 26 DE JULIO DE 2006

El PSOE se cuestiona la idoneidad de continuar con un gobierno de coalición junto a Izquierda Unida, y pospone a septiembre la toma de decisiones.

Izquierda Unida responde que ellos no han aceptado el Pliego de Condiciones de los Molinos-Buenavista, porque no se ha votado; dejando en evidencia a David Lucas y Francisco Santos.

GETAFE
Redacción Local Getafe
26 de julio de 2006
Francisco Sancabal

De una crisis de gobierno sin precedentes se puede marcar la situación que está ocurriendo en el Consistorio getafense. Izquierda Unida ha levantado una polvareda que ha producido la reacción airada del PSOE, partido que se ha cuestionado la idoneidad de continuar el gobierno de coalición con el partido de Izquierdas.

Lo que parecía una serpiente de verano, se ha transformado en una situación complicada, cuando no peligrosa, para el gobierno local. La situación está tan tensa, que se ha suspendido el habitual Desayuno de Prensa previo al Pleno, aludiendo que va a ser un Pleno Municipal con pocos puntos, todos ellos administrativos, cuando en realidad, se trata de un Pleno repleto de medidas políticas, que prometen agrios debates entre los partidos.

Con un alcalde de vacaciones (aunque acudirá al Pleno) no se ha querido convocar a la prensa para no tener que responder por lo que es la situación más díficil para alcaldía desde el principio de legislatura. El PSOE no tiene la mayoría absoluta, por lo que, de romperse el gobierno local, quedaría en minoría; a no ser que se atrajera a las filas socialistas a la concejal No Adscrita.... continua-->

21 julio 2006

EL BUEN ROLLITO ENTRE PEDRO CASTRO Y ESPERANZA AGUIRRE

Editorial publicada el 21 de julio de 2006 en el periódico digital SUR PRESS


El pasado miércoles, Esperanza Aguirre giró una visita a Getafe, concretamente al Polígono de la Carpetania, y para afinar, a las obras de la empresa alemana Siemens.

No alcanzó a entender este tipo de visitas. Se puede aceptar una visita cuando se presenta un proyecto para ver cómo será y otra al finalizarlo para ver cómo ha quedado. Pero una visita en toda la mitad del medio, no parece muy lógica.

Lo mejor de estos actos es el aquilate, los análisis que se pueden sacar de ellos. Como me decía el director de uno de los pocos periódicos locales que dicen las cosas como son, guste o no, hay que fijarse mucho en los que vienen y para qué.

La noticia, las noticias, no están en las palabras de los protagonistas. Aquí hablaron el presidente de Siemens en España, el alcalde de Getafe y la Presidenta. Cada cual alabó a los otros, y se autoalabaron. Escuchándoles todo va fenomenal. Se magnificó la instalación de la multinacional alemana en la Carpetania, la consecuencia de más de 800 puestos de trabajo directos, la inversión. Pero nadie se refirió a los problemas urbanísticos de la antigua ubicación de la factoría, ahora reconvertida en suelo carisimo, para viviendas más caras aún, para llenar a rebosar, los bolsillos de los de siempre; de los que el alcalde dice que no actúan éticamente.

Hubo muchos gestos a enfatizar. Por ejemplo, la cantidad de personal que aglutina una visita de la Presidenta. Hubo un número importantísimo de periodistas, entre reporteros, fotógrados y cameramas, que habitualmente no se pasean por Getafe; lo que indica que la presidenta Popular atrae a los Medios como la miel a los osos.

Más nos llamó la atención la concurrencia de una legión de señores trajeados, pasando más calor que un lagarto en el Sahara, que no hacían nada, sólo rodear a los políticos principales, sonreir sus gracias y mirar a todos lados mientras se secaban el sudor. Suponemos que, tal y como dice un célebre fontanero castrista: "había que estar".

Algo a resaltar es la presencia de concejales, de los tres grupos: Socialista, Popular, e Izquierda. Parecería que se tomaron la mañana libre, que no tuvieran otra cosa que hacer, y se entretuvieron acompañando a la Presidenta y a sus compañeros líderes. Lo cierto es que, los concejales de Getafe, parecen las guardias de corps de sus jefes. Estuvieron 4 del Partido Popular, 6 del PSOE y los 3 de Izquierda Unida. Todos ellos caminando entre el populacho, intentando encontrar posiciones, cosa harto difícil, debido a la cantidad de "gente guapa" (o sea, pudiente) que rodeaba al alcalde y a la presidenta. Y no tiene demasiado sentido, porque para recibir a la presidenta regional ya estaba el alcalde, quien hubo de suspender sus vacaciones, haciendo de menos a David Lucas, alcalde en funciones, por lo que no sabemos que pintaban allí las concejalas de Mujer y Mayores; bueno si, dejarse ver, porque se juegan el número dos. Por cierto, la responsable de protocolo también estuvo paseando su palmito entre la elite, demostrando que aún no se ha cerrado nada en cuanto a la Lista.

Pero lo más llamativo es observar a Pedro Castro y Esperanza Aguirre. Hay que reconocer que hay química entre ambos políticos; de hecho, el propio alcalde llegó a decir que "algunos piensan que lo nuestro es de ahora, pero viene de hace mucho tiempo" a lo que la presidenta aseveró. Es decir, que el buen rollito no es de ahora.

Castro siempre ha destacado por su política camaleónica y su condición especial para llevarse bien con sus rivales: Gallardón y ahora Aguirre. Esta forma de comportarse ha beneficiado mucho a la ciudad, y justo es reconocerlo, porque, de hecho, Getafe es la niña mimada de la Comunidad, llevándose un montón de millones de la CAM. La buena relación personal entre ambos líderes, permite que el diálogo sea más fluido, entre ellos, claro, porque después nos toca asistir al triste espectáculo en los Plenos, cuando algunas acólitas de Castro arremeten con saña contra la presidenta regional y su partido. Algunos dirán que forma parte del juego político, pero la realidad es otra, y en el Partido Popular no sientan nada bien ese tipo de ataques foribundos contra Esperanza Aguirre y su política, cuando, además, la Comunidad ha apostado por Getafe.

Pero lo mejor es leer entre líneas, y en este tipo de actos, las letras aparecen en pantallas gigantes, como los partidos de fútbol. El futuro político de Castro pasa por la Comunidad. Es un clamor que si Simancas gana las elecciones (con o sin apoyo de IU), Don Pedro se marchará a la puerta del Sol a sentarse en el despacho de una Consejería. Entonces es cuando deberá entregarse a fondo en su parcela dialogante. Simancas no puede ni ver a la Presidenta, a la que envidia y "odia" porque la considera la culpable de no estar sentado en el sillón presidencial; cuando en realidad, fueron sus malas artes negociaciadoras con sus propios compañeros, los mismos que auparon a Rodríguez Zapatero en menoscabo de José Bono, los que propiciaron la traición socialista entre los socialistas. El PP se benefició de la mala gestión de la crisis interna que sufrió el PSOE madrileño, cuando después de haberles prometido Simancas lo que fuera a Tamallo y compaña, les dejó con el culo al aire. Y ellos se vengaron. Y el PP se benefició.

Por lo tanto, con Simancas como presidente y con Porta como segunda (la misma que estaba en todos los ajos tamalliles) el diálogo entre PSOE y PP puede ser una copia del diálogo entre Zapatero y Rajoy; es decir, una hecatombe, ya que el presidente del Gobierno sólo se ha dedicado a destrozar todo aquello que había creado el PP de Aznar (lo malo, que era mucho y lo bueno que también era mucho) De forma que se puede levantar una barrera entre los dos principales partidos, insalvable y de funestas consecuencias para la Comunidad, ya que, al igual que ZP, Simancas no tiene una política definida, sólo defiende el anti Pepeismo. La segura buena gestión de Gregorio Gordo podrá limar alguna aspereza, toda vez que el getafense si tiene una política clara, un ideario claro de izquierdas; no como su jefe de filas, Llamazares, que es el primer lacayo de Rodríguez Zapatero, creyendo que está en el gobierno, cuando en realidad no es más que un "tonto útil", que aboca a la Coalición a la desaparición.

Pero en esta hipótesis, que, confesamos, es casi imposible de llegar a observarse, Pedro Castro tendría un papel fundamental, porque sus dotes dialogantes y políticas, podrían servir de puente entre un PSOE-Simancas y un PP-Aguirre. De hecho, y teniendo en cuenta que Pedro Castro es docenas de veces mejor político y más listo y hábil que Rafael Simancas, todo el peso de la interlocución entre los partidos caería sobre sus anchas espaldas. Es más, con mucha seguridad, no acabaría la legislatura sin que el PSOE madrileño hubiera decidido que el cambio de líder sería la mejor posibilidad de continuar. ¿Pedro candidato a la presidencia?; y ¿por qué no?

En el supuesto, mucho más real, de que Esperanza Aguirre repita, a tenor de la excelente marcha de la región (con algunas destacadas salvedades) Pedro Castro volvería a ser protagonista en la relación interpartidista, manteniendo el buen rollo de hoy día, las relaciones entre los dos partidos serían mucho más fluidas y cordiales; y sobre todo, productivas.

Cuesta entender que el PSOE madrileño prefiera a un proyecto de político, que aún no ha demostrado nada, excepto la pacificación de la FSM, en lugar de a un político consumado, quemado en lo local, su ciudad, pero con muchas posibilidades en lo regional. La experiencia de Castro en Getafe debería ser aprovechada, sin dudas, en la Comunidad de Madrid.

Además, si tal y como los mentideros madrileños vocean, Simancas va a ser trasplantado de la candidatura regional a un ministerio o secretaría general, a cambio de un peso pesado socialista, que todos los ojos giran hacia la vicepresidenta De la Vega, en este caso, cada día más seguro, Pedro Castro volvería a tener un papel fundamental, ya que, tanto si ganaran los socialistas como si no, de la Vega necesitaría el apoyo y consejo de este avezado alcalde.

Con todo, los protagonistas, que conocen mejor que nadie lo que se está cociendo en la cocina, mantienen su buena relación, que no es imagen ni escena, sino real. Aguirre respeta a Castro, y éste aún más a la presidenta, porque es consciente de que el Getafe que tanto alardean los fontaneros psesoistas, no sería posible sin la apuesta clara de Esperanza Aguirre por la Capital de la Comarca.

Lo que quede en Getafe, es asunto de otro costal.

Francisco Sancabal

19 julio 2006

¿QUIÉN SERÁ EL FUTURO ALCALDE?

Esta es la pregunta, siempre y cuando el PSOE gane las elecciones en Getafe. Porque aunque no hay la más mínima duda de que Pedro Castro será el próximo candidato por el partido Socialista, las cosas no están tan claras en cuanto a quién terminará la próxima legislatura.

Dos candidatos a Alcalde

Se plantean varias probabilidades en los mentideros getafenses. La primera es que Rafael Simancas consiga el sillón presidencial de la Puerta del Sol. Para ello, tiene que desbancar a Esperanza Aguirre, cosa harto difícil, a no ser que Gregorio Gordo acuda en su auxilio; siempre que los votos de la Izquierda y del Centro-Izquierda sumen uno más que los del Partido Popular. Entonces, con Rafael en la poltrona regional, Pedro Castro ascendería hasta una Consejería, dejando el campo libre a su sucesor.

La segunda posibilidad es que, aun sin ganar en Madrid el PSOE, Pedro Castro también ceda el bastón de mando a lo largo de la legislatura, para dedicarse a otra tarea dentro del Partido en el área institucional o regional.

En todo caso, voces autorizadas no desmienten la más que segura marcha de Castro, gane o no las elecciones.

Entonces surge la gran duda. ¿Quién será su sustituto? Delfín no hay. Aunque sólo existen dos posibilidades.

David Lucas está achicharrado por el propio partido, le han dejado todos los bailes sueltos y los más difíciles y, además, él mismo se ha machacado al defender lo indefendible y no luchar más por su propia opción, para la mayoría de los ciudadanos, la más correcta y válida de entre todos los socialistas. El acoso y derribo que ha sufrido el Concejal de Hacienda sólo es comparable con sus propios errores políticos. Además, como es conocido, Castro es un especialista en quemar a sus delfines, y a todos los compañeros que le hacen sombra.

Francisco Santos, el más político, controla el partido, pero siempre por debajo de su jefe de filas, quien es, en realidad, el único y exclusivo Boss. Santos es, junto a Lucas, el obligado referente, pero ya ha manifestado (en petit comité) que no quiere ser alcalde. Otra cosa es lo que suceda cuando el partido le obligue a aceptarlo: o David o Tu; y el jefe no quiere a David....

Otro que tenía, sólo tenía, posibilidades era José Manuel Vázquez, pero sus errores de gestión, debidos principalmente a dos cosas: su excesiva disciplina al alcalde y sus favores a los grupos folclóricos, le han dejado fuera de la jugada. Además, la jugada que pretendían hacer algunos grupúsculos socialistas, cercanos a la 14 de Abril y a una Casa Regional, hizo que el alcalde y secretario general del partido entrara en cólera, y llamara a capítulo a los sediciosos. La algarada quedó en intento, y el candidato alternativo que se pretendía presentar en la Agrupación fue aniquilado (políticamente) antes de ver la luz.

Con todo esto, los dos únicos candidatos a suceder a Pedro Castro han movido sus fichas. Santos ha colocado en la Pool a Cristina, de su mayor confianza, mientras que Lucas habría hecho lo propio con Sara; por cierto, este es el segundo toro de la tarde: quién será la mujer número dos de la lista; lo que es lo mismo que decir: quién tendrá el poder Lucas o Santos.

Por otro lado, los movimientos de gestión de uno y otro parecen una carrera de fondo entre dos avezados corredores. Urbanismo ha mejorado y el inteligente profesor del INEM ha sabido capear el temporal de los ladrilleros, de la CAM, de los gestores de cooperativas más rebeldes, y a la propia Oposición interna: Izquierda Unida, el auténtico grano en el culo del ladrilleo getafense.

Lucas, por su parte, ha sabido colocarse estupendamente en el difícil área de la Seguridad y de la Inmigración, controlando con el Plan Local, transversalmente, el resto de las áreas, incluyendo el feudo de su compañero y rival: Deportes, para lo cual no ha dudado en utilizar a las huestes folclóricas del acabado concejal de Cultura.

Francisco Santos se presenta como un hábil interlocutor y se lleva de maravilla con la Oposición Popular, de forma que con sus maneras dialogantes, se presenta como el más estadista munícipe. Lucas, por su lado, es el látigo del PP, de forma que ante la ciudadanía (y también ante la camaradería de la Agrupación) es el único capaz de enfrentarse con las cada día más poderosas fuerzas de José Luis Moreno.

En realidad, ambos son las distintas caras de la misma moneda. El que no podamos apreciar mejor los resultados de su gestión y de sus habilidades políticas, se debe a la presión que infiere el propio alcalde a los suyos.

Cuando Santos tiene más que cerrado y controlado el desarrollo de los Molinos-Buenavista, el alcalde o sus acólitos, sueltan un globo sonda, en los Medios afines, que hace cabecear la nave del concejal de urbanismo. Cuando Lucas actúa de alcalde en funciones, teniendo que salir todos los días a extinguir los múltiples fuegos que provocan los caballeros de Moreno, el alcalde le hace de menos y se vuelve de sus vacaciones para recibir a la presidenta regional. Si David Lucas puede ejercer estupendamente de alcalde –en funciones- en la lucha diaria de la ciudad y contra la Oposición, podría igualmente ejercer de anfitrión de Esperanza Aguirre. Pero no, el alcalde, con su gesto, le humilla una vez más. Por cierto, ni Lucas ni Santos tuvieron ni un segundo de gloria esta mañana en la Carpetania; todo fue para Pedro Castro.

Pero la foto es inevitable. Santos y Lucas, Lucas y Santos son los candidatos a la más que segura dimisión del alcalde; sobre todo si, como parece, Getafe se torna en Leganés II, y Sánchez Coy, emulando a su camarada Raul Calle, consigue más concejales y cierra el grifo del poder de los socialistas, obligándoles a pactar una política auténtica de Izquierdas. Es claro que, José Luis Moreno rozará la mayoría absoluta, y con IU acaparando 5 actas, el PSOE tendrá que claudicar y perder una parte importantísima de su absoluto poder.

Francisco Santos y David Lucas tienen que superar sus diferencias, la mayoría ficticias y fomentadas por los propios fontaneros del alcalde y plantear un frente común claro: el relevo generacional en el PSOE-Getafe.

El problema de fondo es que las fuerzas propias de ambos concejales no son nada –aparentemente- comparándolas con las del alcalde, quien tiene tejida una tupida red de araña de amigos, fontaneros, voceros, agradecidos e incondicionales (por las prebendas) que es muy difícil de romper. Pero esta misma férrea red tiene su punto débil: la necesidad de que el PSOE siga gobernando con el máximo poder, como ahora, porque si no, cientos de sueldos, de subvenciones, de prebendas, de agradecimientos caerían al suelo y se pudrirían como fruta pocha. Es el arma de D. Pedro, pero también su espada de Damocles.

Pero los aires nuevos que surcan los cielos socialistas, unido a la fuerza imparable y cada día más numerosa del PP de Moreno, hacen que la FSM (ahora la llaman de otra manera, pero yo soy un clásico) se haya planteado el relevo y la forma de ejecutarse.

Como pasa siempre con alguien que ha ostentado el poder durante años y años, cuando se pierde, quedan en el camino una legión de plañideras que arrastran su miseria y su dolor; por la pérdida de los favores que recibían. Pero esto es algo que Getafe necesita: una limpieza, abrir las ventanas y que penetre aire nuevo, rejuvenecido y actual.

10 julio 2006

BENITO XVI vs ZAPATERO: RESULTADO 10 a 0

No es que se tratara de un combate, pero no es menos cierto que la Paz que traía el Papa romano estaba siendo maniqueada por Moncloa y su poderosísimo entorno político y mediatico.

Benito XVI ha venido a España a una sola razón: reunirse con las familias católicas de todo el mundo, tal y como se ha hecho en otras ocasiones en otros países y en 2009 se hará en México. Además, también traía su equipaje cargado de apoyo moral, fraterno y catedralicio para los millones de católicos españoles que en los últimos tiempos se sienten apaleados por el gobierno socialista de José Luis Rodríguez Zapatero.

El Papa llegó, vio y venció; es decir, convenció con sus increibles dotes teológicas, su desbordante amor fraterno y su exquisita educación y respeto a todos. Habló de lo que tenía que hablar: de la Familia, de la importancia máxima de esta institución para conformar una Sociedad, del deber de los padres hacia con los hijos y viceversa, incluyendo a los abuelos, como pieza fundamental y al resto de congéneres.

El presidente Zapatero y su gobierno hicieron y se comportaron de forma absolutamente contraria al Sumo Pontífice. Mientras que Vaticano realizó una queda pero resolutiva actuación de Estado, el gobierno socialista de ZP no estuvo a la altura de las circunstancias. Una vez más, Rodríguez Zapatero demostró que no es, por que no sabe serlo, un estadista. Se encuentra a mucha distancia de sus predecesores: Felipe González, y Jose María Aznar; y a años luz del Papa.

Cuando Zapatero ofendió, estúpida y gratuitamente, a la bandera de los EE.UU, demostró no tener ni pagolera idea del protocolo de Estado. Se le achacó su bisoñez gubernamental, se dijo que eran sus comienzos. Ahora han pasado más de dos años y continúa igual; no, peor.

Intentó hacerlo mal, como siempre en estos aspectos, en los funerales por Juan Pablo II y la consagración de Benito XVI, pero la Casa Real le puso firme, negándose a obedecerle, manteniendo su asistencia a Vaticano. De esta manera, de forma casi oculta por los Medios afines, Zapatero no tuvo más remedio que enmendarla y marchar a Roma como presidente de todos los españoles.

Ahora, de nuevo, ha vuelto a meter la pata como hombre de Estado. Negándose a acudir a la Eucaristía, principal acto del Papa, debido a la singular importancia de este sacramento, se ha puesto colorado de forma, otra vez, gratuita. Es cierto que aceptó ser recibido por el Papa, y que éste tuvo palabras cordiales de apoyo y colaboración de la Iglesia hacia el gobierno; incluso le dijo a la Vicepresidenta que "estaba seguro" de que con ella al frente de las conversaciones, el diálogo Iglesia-Estado mejorará. Pero Zapatero, de nuevo actuando como un niño chico, caprichoso y egoista, pensando que sus deseos y pareceres están por encima de su obligación como presidente del Gobierno Español, se negó a acudir a la Misa y a los otros actos. Alegó su vocera que no lo hacía por respeto, porque no es creyente (entiendo que se refiere a católico, ya que en algo creera, digo yo) pero no va por ahí la cosa. El presidente del gobierno, aún él, republicano y laicista, lo es de todos los españoles. Igual que, como republicano (que nada tiene que ver la República como sistema de estado, con la Fe) acude a los actos regios, porque D. Juan Carlos es el jefe del Estado, debería acudir a un evento de tamaña trascendencia como el que nos ocupa, porque no era un obispo cualquiera, sino un Jefe de Estado, el Pontífice de 1200 millones de personas, porque todo el planeta estaba mirando hacia Valencia, a través de los 4000 periodistas acreditados (a los que, por cierto, Moncloa a tenido en un brete y ha hecho todo lo posible por boicotear su trabajo, solicitando dobles acreditaciones), y porque muchos, muchísimos españoles se lo estaban pidiendo a gritos.

Ha quedado el gobierno español, es decir, España, fatal ante el mundo entero, ya que no se comprende que el primer ministro de un país, haga un feo semejante a un Jefe de Estado extranjero. Pero claro, si tenemos en cuenta que Zapatero está haciéndole feos continuos a la propia Casa Real española, lo entendemos todo.

No es un asunto de fe, ni de la Iglesia, cual camina con la misma fortaleza de siempre, pese a los intentos de Moncloa por ponerle troncos en el camino. Se trata de que ZP no sabe a quien representa. Se lo decimos clarito: a España, y en su sueldo entra lo que le gusta y lo que no. Los propios periodistas extranjeros se han quedado helados ante el desplante de Rodríguez Zapatero, algo a lo que no se han atrevido otros estadistas. Debería saber este señor socialista que la Iglesia Católica inventó la diplomacia, de forma que lleva dos mil años en el mundo llevando el evangelio de Jesús a todos los rincones, pero llevándose bien con todos.

Benito XVI ha demostrado saber estar a la altura de las circunstancias. Sus discursos fueron firmes pero comedidos, sin insultar a nadie, sin molestar a nadie, defendiendo lo que la Fe y la Doctrina cristiana afirma: la familia como ente primario e indispensable para la sociedad. Pero eso si. la familia real, hombre y mujer más los hijos.