De infame, de maldad sin parangón podemos definir el video que ha editado el Getafe C.F. para atraer a nuevos socios.
Estabamos de vacaciones, pero ciertos sucesos no pueden esperar a septiembre para ser analizados.
El señor Torres, dueño del equipo de fútbol Getafe C.F. ha puesto en circulación un vídeo blasfemo, insultante, daniño para miles y miles de getafenses cristianos y para todos los ciudadanos en general. En este esperpento de la comunicación, este ladrillero metido a futbolero se ha atrevido a faltar al respeto y a la fe de los cristianos y demás personas religiosas, poniendo imágenes representativas de varias religiones: Cristianismo, Judaísmo e Islam, al aparecer representados Adán e incluso el propio Jesús de Nazaret.
Es un trabajo de publicidad chabacano, insulso, que no dice nada, pero, ante todo, es una grave ofensa a todos los getafenses y a todos las personas sensibles con una creencia de fe.
El Obispado de Getafe ha emitido una nota donde denuncia los hechos pero exculpa al mandatario del equipo de fútbol. ¿Por qué? nos preguntamos. ¿Cómo el Ordinario puede decir que los responsables son los que han diseñado el vídeo y que, encima, no lo hacen con mala fe.
El único responsable es el dueño del equipo de futbol, la persona que ha pagado el trabajo y que, con toda seguridad, lo ha visionado antes de pagarlo y antes de exponerlo al público. Angel Torres es el único responsable de una infamia a los cristianos, de un insulto a la inteligencia y la fe de miles de personas y el único responsable de que este asqueroso vídeo esté en circulación.
Pero hay más. El Ayuntamiento dirigido por Pedro Castro subvenciona opíparamente a este señor con dinero público; le permite mantener y acrecentar su negocio futbolero (porque no es más que una empresa) en suelo e instalaciones públicas; y además, gusta acompañarse de él en cuanto acto público se presenta como alcalde de todos los getafenses. Pedro Castro debe exigir a este señor que retire el vídeo y que pida perdón a los getafenses. Debe, así mismo, retirar todo el dinero público que recibe este señor empresario. Y debe explicar porqué, hasta el momento, no ha dicho esta boca es mía. ¿O es que a Pedro Castro le ha gustado esta mierda de publicidad? ¿O es que está de acuerdo con que se insulte a toda una ciudad que está bajo el amparo de Nuestra Señora de los Ángeles.
Getafe es, pese a lo que diga el concejal de Cultura, una ciudad, un pueblo cristiano, que camina en torno a su Patrona: la Virgen de los Ángeles, a la que ama y venera desde siglos. Nadie, ni siquiera los soldados que fusilaron el monumento del Sagrado Corazón se atrevieron a tocar a la Virgen de los Ángeles, a nuestra Señora, porque sus propios camaradas getafenses les amenazaron con fusilar a aquel que dañara a la Virgen.
Hoy, este empresario del futbol, asiduo de la alcaldía y de la concejalía de Urbanismo, ha insultado y vilipendiado, blasfemado contra Jesucristo y contra la Fe cristiana (y por extensión a todos los que ven en el Maestro de Galilea al Hijo de Dios) Sólo se nos ocurre comparlo con esa otra abominación pseudocultural que fue la exposición de fotos pagada y prologada por la Junta de Extremadura (en manos socialistas) De nuevo, los cristianos tenemos que asistir al escarnio y el insulto gratuito. Basta Ya.
El Ayuntamiento ha callado. El PP ha callado. Izquierda Unida ha callado. Y el Obispado ha hablado pero con sordina, sin querer molestar al sujeto que ha producido esta infamia.
Es momento de veraneo, de poca lectura de noticias, de escaqueo general de nuestros políticos. Pero un acto como éste merece una líneas, en el sentido que sea, por parte de los gobernantes y los políticos profesionales. De todas maneras, el Pueblo hablará.
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